Con amplios respaldos, las normas vuelven a estar vigentes mientras crece la expectativa por la reacción del Ejecutivo.
El Senado de la Nación rechazó este jueves los vetos presentados por el presidente Javier Milei a las leyes que declaran la emergencia pediátrica y que aseguran el financiamiento de las universidades públicas. Con 59 votos a favor para la norma pediátrica y 58 para la ley universitaria, ambas iniciativas lograron los dos tercios necesarios para ser insistidas por el Congreso.
La ley de emergencia pediátrica establece la asignación prioritaria de recursos para el Hospital Garrahan y otros efectores de salud, incluyendo infraestructura, insumos, medicamentos y personal esencial. También contempla la recomposición salarial del personal de salud, la eximición del pago de ganancias por actividades críticas y la declaración del Garrahan como hospital de referencia nacional en atención pediátrica de alta complejidad. El impacto fiscal estimado para julio-diciembre alcanza los $65.573 millones.
Por su parte, la norma universitaria fija la actualización automática del presupuesto y de los salarios de docentes y no docentes de las universidades públicas según el Índice de Precios al Consumidor (IPC), y establece negociaciones paritarias obligatorias con actualizaciones bimestrales y mensuales para mantener la remuneración acorde a la inflación.
Durante la sesión, legisladores de distintos bloques destacaron el carácter político y social de la discusión, subrayando la importancia de garantizar la educación y la salud pública. El rechazo a los vetos representa un nuevo revés para el Gobierno, que días atrás había dilatado el giro de fondos para la norma sobre discapacidad, y deja en espera los próximos pasos del Ejecutivo respecto al cumplimiento de estas leyes.