Los diputados Waldo Wolff, Adriana Noemí Ruarte, y Alberto Asseff con el patrocinio de los abogados Juan José Ávila y Tomás Farini Duggan, elaboraron un documento en el que repudiaron todo acto de violencia y en el que expresaron la falsedad de que la presidente del partido PRO, Patricia Bullrich y/o el diputado nacional Fernando Iglesias, explícita o implícitamente a través de las redes sociales o de cualquier otra forma, hayan incitado a la violencia individual o colectiva, ni tampoco motivar los ataques que sufrieron los periodistas del canal C5N, ni a violar el aislamiento social y obligatorio.
En el mismo documento, los diputados nacionales declararon su adhesión a los conceptos expuestos en los mensajes transmitidos en redes sociales, que fueron difundidos como motivadores de la presente denuncia y que, lejos de incitar a la violencia, tienen por exclusivo objeto apoyar a la ciudadanía en sus pacíficos reclamos de transparencia institucional, respeto a los valores republicanos y la imperiosa necesidad de exigir justicia frente a los flagrantes actos de corrupción que son objeto de aletargados procesos judiciales contra integrantes y exintegrantes del sector político que actualmente nos gobierna.
Manifestaron por escrito que la razón que se esconde detrás de la denuncia es «perseguir penalmente el ejercicio del disenso y limitar o prohibir el derecho de manifestarse públicamente y en paz, en defensa de sus ideas».
Es así que la finalidad de la presentación legal es ser incluidos entre los denunciados, para exponer que no consentirán que se persiga penalmente el ejercicio de los derechos y libertades que el sistema republicano de gobierno reconoce a todo ciudadano.