Un avión de carga con bandera venezolana sancionado por Estados Unidos y que pertenecía a una empresa iraní fue inmovilizado por el Gobierno nacional, luego de haber aterrizado en el aeropuerto de Ezeiza según confirmaron las fuentes consultadas.
Fuentes oficiales agregaron que se le retuvo el pasaporte a la docena de venezolanos y a los al menos cinco iraníes que viajaban en la aeronave. “Solo pueden salir del país en un vuelo de línea”, reveló un vocero de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).
El Boeing 747 Dreamliner de la empresa Emtrasur había aterrizado el lunes en el aeropuerto de Córdoba como consecuencia de la densa niebla que había en Buenos Aires.
Pero en Ezeiza lo esperaba personal de la mencionada PSA, la Aduana, la Dirección de Migraciones y la Policía Federal, con información de inteligencia aportada por varias agencias del mundo.
En este sentido, una fuente de los organismos que realizó el procedimiento señaló: “Transportaba autopartes para una empresa automotriz, se revisó la carga varias veces, pero no se encontró nada extraño y fue liberada”.
No obstante, dentro del avión inmovilizado se encontraban al menos cinco personas de nacionalidad iraní, y algunas de ellas con presuntos nexos con las Fuerzas Quds.
Esta última es una división de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica especializada en guerra asimétrica y operaciones de inteligencia militar, y además es la responsable de llevar a cabo operaciones fuera del territorio de su país.
El escándalo del avión venezolano se filtró a partir de un pedido de informes firmado por Gerardo Milman y otros diputados de Juntos por el Cambio. “Dado el comportamiento enigmático del vuelo, la propiedad cuanto menos confusa de la aeronave y la composición de la tripulación, es que solicito a mis pares que me acompañen en el presente proyecto”, se afirma en la solicitud.
El caso del avión militar de EEUU demorado en Ezeiza
Este caso hizo recordar de inmediato al ocurrido en febrero de 2011 con un avión militar de Estados Unidos que fue también fue demorado en la terminal aérea de Ezeiza.
Según la denuncia que realizó en aquel momento el por entonces gobierno de Cristina Kirchner, la aeronave C-17 de la Fuerza Aérea de EEUU intentó traficar armas y equipos de espionaje como si fueran para un curso de entrenamiento policial.
Sin embargo, documentos oficiales revelados luego demostraron que la Casa Rosada sabía lo que transportaba el avión, ya que el Ministerio de Seguridad había dado su conformidad al material y al personal estadounidense que iba a participar de un curso de capacitación a policías federales argentinos.
FOTO: Sebastián Borsero – Aviacionline.com