El presidente Javier Milei arribó esta mañana a Bahía Blanca en una visita sin anuncio oficial para analizar la situación tras el devastador temporal que dejó 16 muertos, desaparecidos y severos daños materiales.
El mandatario aterrizó en la base aeronaval Comandante Espora y desde allí se trasladó en camionetas, custodiado por la Policía Federal y Seguridad Presidencial, hasta la exterminal de ómnibus donde funciona el centro de monitoreo de la ciudad.
Allí, fue recibido por el intendente Federico Susbielles, quien le brindó un panorama detallado sobre el impacto del temporal y las tareas de asistencia en marcha.
Tras permanecer varios minutos en el centro de monitoreo, Milei abordó nuevamente las camionetas y se trasladó a un destino desconocido, sin que haya trascendido información oficial sobre el resto de su agenda en la ciudad.
Según fuentes locales, el viaje se mantuvo en reserva para evitar que se generaran protestas o manifestaciones en su contra.
Desde temprano supervisó el montaje de un puente militar en el Canal Maldonado, que desbordó durante el temporal y generó graves destrozos en la ciudad.
Junto a Susbielles, el mandatario recorrió la zona afectada y observó cómo el Ejército trabaja en la instalación del puente, una estructura clave para restablecer la conectividad en los sectores más dañados.
Durante la recorrida, ingenieros militares explicaron a Milei el proceso de armado, mientras evaluaba el impacto del desborde del canal, que socavó parte de su estructura y provocó el colapso de calles y viviendas cercanas.
El Presidente sigue de cerca las tareas de emergencia tras el temporal que dejó 16 muertos y cuantiosos daños en Bahía Blanca, en su primera visita a la ciudad desde la catástrofe.
Arribó a Bahía Blanca, situada a unos 650 kilómetros de la Capital Federal, junto a su hermana y secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, y se reunió con los ministros Patricia Bullrich (Seguridad) y Luis Petri (Defensa), entre otros funcionarios.