La localidad de Villa Mascardi, ubicada a unos 35 kilómetros de San Carlos de Bariloche es una zona de tensión donde persisten históricos conflictos territoriales por la toma de tierras.
«Basta de ocupas. El Estado debe defender los dominios públicos y privados» y «No somos fascistas, no estamos armados, somos vecinos» fueron algunas de las leyendas que aparecieron en los carteles de los manifestantes. El reclamo obedece a la inacción de las autoridades nacionales.
«El Estado no está presente. No defiende a sus ciudadanos y tampoco cuida y garantiza la propiedad privada”, publicó en sus redes sociales Lorenza Marzen, diputada nacional por la provincia de Río Negro, quien a su vez afirmó que la ausencia de respuesta del Estado Nacional y provincial es “desesperante”.
En esa línea, ayer circuló una carta del Sindicato de Guardaparques Nacionales enviada al presidente de Parques Nacionales, Daniel Somma. “El Cuerpo de Delegados del Sindicato de Guardaparques Nacionales de la República Argentina reclama con gran preocupación por el silencio institucional y la falta de garantías laborales por parte de la Administración de Parques Nacionales para con los compañeros que hoy se desempeñan en la zona sur del Parque Nacional Nahuel Huapi, sobre todo el personal que se destaca en el área de Villa Mascardi y Seccional Maitenes”, dice la misiva.
El escrito denuncia el “desamparo institucional” al que se ven sometidos los guardaparques que se desempeñan en la zona sur del parque Nahuel Huapi, en el marco del conflicto por la toma de tierras. “Como es de público conocimiento en la zona de Villa Mascardi se ha desatado un conflicto territorial donde se ve comprometido el patrimonio y bienes del Estado Nacional, razón por la cual nuestros compañeros son el centro de reiterados hechos de violencia, recurrentes amenazas y hasta atentados a vehículos oficiales y particulares, siendo a veces con un alto tenor de agresividad como sucedió en la Seccional Maitenes donde se registraron en varias ocasiones disparos de armas de fuego hacia la vivienda siendo visibles los impactos sobre las paredes”, explicaron.
“Ante el visible desamparo Institucional, este tipo de agresiones se han vuelto frecuentes sin consecuencias graves hasta el momento, aunque no por esto debemos aceptarlas como ‘normales’”, manifestaron. En la carta argumentaron que debieron realizar tareas de control y vigilancia para brindar mayor seguridad en el tránsito vehicular sobre la ruta nacional 40, pero reclamaron que “estas medidas deben ser acompañadas a nivel Institucional por la gravedad del asunto”.
“Estas situaciones de violencia provocan desánimo personal, perjudica el desempeño laboral, genera gran preocupación dentro de los familiares de los compañeros, que a pesar de estas circunstancias han demostrado un gran compromiso para continuar realizando las tareas que según sus funciones deben desempeñar. Por lo antes descrito y por otros hechos de conocimiento interno es que solicitamos se tomen las medidas pertinentes para garantizar la integridad física de las compañeras y compañeros”, exigieron desde el sindicato, fundado el 5 de junio de 1989 en la ciudad de San Carlos de Bariloche e inscripto con el nombre “Asociación de Guardaparques Nacionales de la República Argentina AGN-RA” bajo la Resolución 924-1990 del Ministerio de Trabajo.
FUENTE: MDZ e Infobae